Uno de los Vengadores más carismáticos es Thor (Chris Hemsworth), el dios del trueno. Desde su aparición, hace 11 años, en una película de Kenneth Branagh, se convirtió en uno de los superhéroes más carismáticos, haciendo suspirar a las fanáticas por su relación romántica con la doctora Jane Foster (Natalie Portman). En Un mundo oscuro, filmado dos años después por Alan Taylor, se vio aventajado por su tramposo hermano Loki (Tom Hiddleston), que merecería, incluso, su propia serie televisiva.
En Ragnarok, de Taika Waititi, en el 2017, Thor se las tuvo que ver, sin la ayuda de Jane, con su temible hermana (Cate Blanchett), que amenazaba con destruir al mundo.
Para Thor: amor y trueno, Waititi parece haberse compenetrado mejor con el dios y, lo que es más importante, vuelve a reunirlo con su amada doctora, quien está enferma de cáncer, pero el mjolnir la selecciona; juntos, deberán enfrentar a Gorr (Christian Bale), que con su necroespada se da a la tarea de matar dioses.
El director de Jojo rabbit buscó recrear las cintas románticas de los ochenta, pero no puede evitar su vena cómica, que no termina por funcionar del todo, aunque tiene momentos muy divertidos.
Thor: love and thunder, será del agrado de los fanáticos de Marvel, pero no conectará tanto con quienes no lo son.
Por: Jorge Carrasco V.
Egresado de la Facultad de Ciencias Políticas de la UNAM. Periodista activo desde 1981 en diversos medios. Especialista en temas internacionales, deportes y espectáculos. Autor de biografías sobre Pedro Infante y Joaquín Pardavé de Editorial Tomo.
