El circo del Congreso local

“Sería importante que la LXVI Legislatura tenga integrantes con un buen nivel político para evitar que sesión tras sesión haya dislates y arrebatos. Por ello la importancia de elegir correctamente en las urnas y de esta manera tener legisladores que cumplan con las expectativas de la gente”.

Faltan sólo unos días para que inicien las campañas a diputaciones locales en el estado de Hidalgo, cuando ya podremos ver más movilización en las calles y las avenidas, gente entregando propaganda y tocando puertas con la intención de convencer al electorado. Y es que, si bien es cierto que Morena lleva ventaja, también es importante saber que no puede dormirse en sus laureles esperando que la pura marca le dé el triunfo.

 

Será una competencia que marque la tendencia de aceptación del mandatario estatal, Julio Menchaca, y sobre todo que puede sentar las bases de su gobierno en proyectos a mediano y largo plazo. Por ello la importancia de saber el escenario que se vive en Hidalgo en esta primera administración de alternancia.

 

Pero la reflexión va más allá: ubiquémonos en la LXVI Legislatura, donde seguramente Morena será mayoría y solamente habrá una salpicada de algunos otros colores y representaciones. Todas y todos los hidalguenses deseamos que la ciudadanía elija con base en la razón, con certeza e inteligencia, pues invariablemente al Poder Legislativo terminan por colarse perfiles indeseables.

 

Tenemos muchos ejemplos de todos los colores que ponen en vergüenza el recinto legislativo por su falta de preparación y de entendimiento. Tan sólo en esta Legislatura podemos ver a Fortunato González, con un nivel que ni siquiera corresponde a un regidor; también a Sharon Macotela, quien ha exhibido como nadie las carencias del Congreso y ni qué decir del diputado que ha sido señalado como acosador, Timoteo López.

 

Casos como los de María del Carmen Lozano, José Noé Hernández, Francisco Berganza y Gabriela Godínez, cuyo trabajo ha sido gris y no han mostrado mayor interés que el de cobrar sus dietas, es justo lo que se debe evitar en la próxima Legislatura.

 

Sería importante que la LXVI Legislatura tenga integrantes con un buen nivel político para evitar que sesión tras sesión haya dislates y arrebatos. Por ello la importancia de elegir correctamente en las urnas y de esta manera tener legisladores que cumplan con las expectativas de la gente. Es más, una de las primeras acciones de importancia es saber quiénes encabezarán la Junta de Gobierno del Congreso, es ahí donde se requieren liderazgos resolutivos y que sean bien vistos.

 

Ya con más profundidad y detenimiento, será importante saber en su momento quiénes encabezarán las comisiones más importantes, como la de Legislación y Puntos Constitucionales, la de Hacienda y la de Gobernación, porque sin demeritar a las demás, en estas tres se mueven los intereses políticos más importantes.

 

Con el inicio de las campañas a diputaciones locales empieza la operación en territorio que será fundamental en los resultados del 2 de junio. Hasta ahora, la campaña al Senado y a las diputaciones federales ha sido de poco o nulo interés para la ciudadanía, pero como se sabe, las campañas locales, particularmente las de los ayuntamientos, prometen mayor participación.

 

Esta semana empieza el camino para lo que será el mosaico legislativo, con la esperanza de evitar mantener parásitos con recursos públicos y exigir elevar el nivel de trabajo y productividad por el bien del pueblo de Hidalgo.


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