Ser y Devenir 49

¿“Todas las rosas tienen espinas” es una proposición sintética o analítica? Es decir, ¿proporciona información acerca del mundo o el predicado ya está contenido en el sujeto? Casi todos mis alumnos decían de manera precipitada que era analítica, el lenguaje los había embrujado y generalizaban en vez de hacer distinciones lingüísticas del verbo “tener”. ¿Hay rosas sin espinas? Basta con quitárselas. ¿Pero podemos hacer lo mismo con la extensión en la proposición “Todas las rosas tienen extensión”? No todos los usos de la palabra ‘tener’ tienen el mismo significado, empero, la negación de dichas proposiciones revela su carácter sintético o analítico, esto es, la verdad o falsedad de las primeras y el sentido o sinsentido de las segundas.

—¿Serner?

Abro los ojos y ella continúa sentada a mi lado, suspiro hondo y vuelvo a cerrar los ojos. Me enrosco nuevamente sobre mí mismo como un armadillo, protegiéndome dentro de mi caparazón entre el mundo racional y el universo de mi sensibilidad. Es cuando las preguntas aparecen todo el tiempo. ¿Hay realmente proposiciones sintéticas a priori, i.e., enunciados que, a pesar de proporcionarnos información acerca del mundo, su verdad no deriva de la experiencia? ¿O sólo es un truco paradigmático de Kant?

—¿Quieres ir a tomar algo? —vuelve a preguntarme—. Me gustaría mucho platicar contigo.

—¿Cómo te llamas?

—Licht.

—¿Lichtenstein?

—Sólo Licht —me dice riendo, la volteo a ver extrañado y ella me aclara—. Es que me dijiste lo mismo cuando te conocí. ¿No te acuerdas?

Niego y, luego de ver el vacío por unos momentos, siento su mano en mi hombro y sin oponer más resistencia me pongo de pie. Cruzamos la calle y nos metemos a un restaurante italiano. Nos sentamos frente a una gruesa mesa de madera desgastada intencionalmente con uniones y tornillos de acero. Ella me mira inquieta mientras yo observo a mi alrededor las luces ocre, las macetas de flores colgadas del techo y la colorida barra de las bebidas. Ahí quiero estar. Ella me sigue mirando pero yo sigo distraído por los excesivos adornos de legumbres y carnes frías, una pintoresca mujer vestida de traje típico de algún lugar de la península y algunos cuadros que aluden convenientemente al imperio romano. Me da dolor de cabeza.

—¿Gustan algo de beber? —nos pregunta el mesero.

Ella vino tinto y cerveza para mí. Entonces Licht comienza a hablar y, aunque me mantengo adormecido, distante y entumecido del ánimo, entiendo con claridad lo que me dice. Todo lo que dice recordarme. El seminario de filosofía, las sesiones e intensas discusiones, pero no recuerdo nada. La crítica de Nietzsche a la metafísica occidental, la crítica de Heidegger a la modernidad y la crítica de Wittgenstein al quehacer filosófico tradicional. Sólo recuerdo dichas críticas siendo estudiante, quizá en mis primeros años dando clase en las universidades pero no recuerdo nada de lo que ella me relata. Nada de nada. Hasta que menciona a mi hermano.

—¿Lo recuerdas? —pregunto sorprendido.

—¡Por supuesto! Incluso salimos juntos un tiempo. ¿En serio no te acuerdas?

—Mi hermano nunca me hablaba de su vida personal y yo tampoco quería averiguarla, aunque inevitablemente me enteraba de sus aventuras cuando recurrentemente me confundían con él.

—Pues es que son idénticos.

—Éramos.

—¿Cómo? —pregunta extrañada.

—Él murió el año pasado.

Una línea invisible traspasó su cuerpo y su rostro cambió por completo de semblante, todo en un instante; sus ojos brillantes se apagaron y desprendieron agua que descendió hasta sus labios que contenían un inesperado y profundo dolor. Me sorprendió su reacción. Se disculpó, se puso de pie y se retiró rápidamente hacia los baños.

—¿Quiere que le traiga algo más? —me pregunta el mesero.

—Trae una botella de mezcal.

 

Continúa 50

Por: Serner Mexica

Filósofo por la UAM, estudió la Maestría en la UNAM y el Doctorado en la Universidad de La Habana. Fue Becario de Investigación en El Colegio de México y de Guionismo en IMCINE. En 2007 obtuvo el Premio Nacional de Dramaturgia EMILIO CARBALLIDO por su obra "Apóstol de la democracia" y en el 2011 el Premio Internacional LATIN HERITAGE FOUNDATION por su tesis doctoral "Terapia wittgensteiniana".






EL INDIO FILÓSOFO - Serner Mexica

Filósofo por la UAM, estudió la Maestría en la UNAM y el Doctorado en la Universidad de La Habana. Fue Becario de Investigación en El Colegio de México y de Guionismo en IMCINE. En 2007 obtuvo el Premio Nacional de Dramaturgia EMILIO CARBALLIDO por su obra "Apóstol de la democracia" y en el 2011 el Premio Internacional LATIN HERITAGE FOUNDATION por su tesis doctoral "Terapia wittgensteiniana".